Hay muchos mitos y desconocimiento alrededor de la salud sexual femenina: no sólo en lo que respecta a métodos anticonceptivos y enfermedades de transmisión sexual, sino también con algunos de los más frecuentes problemas sexuales en las mujeres, como son el deseo y la satisfacción sexual.
Esta falta de conocimiento entorno a nuestra salud sexual provoca que muchas mujeres continuemos arrastrando creencias erróneas que condicionan nuestras experiencias sexuales, dificultando que podamos llevar una vida sexual satisfactoria e incluso afectando a nuestro bienestar físico.
A continuación, aclararemos algunas de las dudas más comunes acerca de la salud sexual femenina; para ayudarte a conocerte y disfrutar de tus experiencias sexuales en toda plenitud.
Tengo poco deseo sexual: ¿debo preocuparme?
Muchas mujeres se preocupan por no sentir deseo sexual, especialmente cuando se trata de velar por la satisfacción sexual de su pareja, y buscan explicaciones para de “ponerle remedio”.
La realidad es que no hay un nivel «regular» de deseo sexual, sino que fluctúa: no es algo que sentiremos siempre, ni con la misma intensidad (influido por factores como la salud mental, los cambios hormonales, o incluso la alimentación); y también variará de una mujer a otra. Cada una de nosotras es un mundo, y lo que es habitual para una, puede ser muy diferente a lo que es habitual para otra.
¿Cómo reavivar mi deseo sexual?
Hablar abiertamente de tus necesidades y deseos sexuales con tu pareja es clave para fortalecer vuestra intimidad y ayudaros a llevar una vida sexual satisfactoria, y eso incluye también comunicar cuando no tienes ganas. Recuerda: nunca debes forzarte a mantener relaciones sexuales si no lo deseas.
Si realmente te preocupa la falta de deseo sexual, no dudes en consultar con un profesional que te asesore según tus necesidades particulares para ayudarte a recuperar la chispa y disfrutar plenamente de tus relaciones sexuales.
Si no lubrico, ¿significa que no estoy excitada?
No. Hay mucho estigma en lo que respecta a la sequedad o falta de lubricación vaginal a la hora de mantener relaciones sexuales, pero lo cierto es que es algo mucho más común de lo que se cree y no tiene por qué deberse a una falta de excitación.
Aunque es común durante la menopausia, la falta de lubricación en la vagina puede afectar a mujeres de todas las edades debido a factores muy diversos; como la fase del ciclo menstrual, el uso de anticonceptivos, la salud mental o el consumo de alcohol (entre muchos otros).
Recuerda que recurrir a lubricantes nunca es un fracaso, sino un gran aliado para maximizar el disfrute en tus relaciones sexuales.
¿Es común que me duela al hacerlo?
No. El dolor al tener relaciones sexuales es algo que experimentan muchas mujeres, pero no es normal. Puede deberse a diversas razones: falta de lubricación, lesiones en la piel de la zona íntima u otros problemas estructurales como el vaginismo.
Si el problema persiste, acude a un profesional de salud para detectar las posibles causas y tomar las medidas necesarias.
¿Es algo natural que me cueste llegar al orgasmo?
La dificultad para llegar al orgasmo al mantener relaciones sexuales es algo muy común para la mayoría de las mujeres (según estudios, el 10% – 15% de las mujeres nunca ha tenido un orgasmo, y un 50% de las mujeres encuestadas manifiestan estar insatisfechas con la frecuencia con la que lo alcanzan)1. Pero aunque sea un problema común, no hay que caer en el error de normalizarlo.
De nuevo, la comunicación con tu pareja durante vuestras relaciones sexuales es un elemento esencial y ayudarte de juguetes y lubricantes con efecto calor, como Ginesens Lube de Cumlaude Lab, puede ayudarte a estimular el placer y ser un plus genial para ambos.
Si notas que tienes muchas dificultades para alcanzar el orgasmo, no olvides que buscar asesoramiento profesional siempre es una opción.
¿Cuántas veces es “normal”?
A pesar de lo que parece que se nos quiera hacer creer, a la hora del sexo, no hay un “número”.
No existe una cantidad mínima ni máxima “aceptable” de parejas sexuales que debamos tener, ni tampoco en lo que respecta a la frecuencia de mantener relaciones sexuales. Como hemos dicho, la sexualidad varía de persona a persona según factores muy diversos, por lo que no debemos obsesionarnos con cuantificar nuestras experiencias sexuales.
¿Cómo cultivar una vida sexual satisfactoria?
El camino hacia una vida sexual satisfactoria comienza con el autoconocimiento. Explora tu cuerpo, entiende tus deseos y comunícate abiertamente con tu pareja para disfrutar plenamente de tus experiencias sexuales. Sigue hábitos saludables que contribuyan a tu bienestar físico, como una dieta equilibrada, ejercicio y una buena higiene, especialmente en tu zona íntima (recuerda que los productos de Cumlaude Lab pueden ayudarte).
¿Las infecciones vaginales solo son causadas por enfermedades de transmisión sexual?
La respuesta rápida: NO.
Las infecciones vaginales son un problema mucho más común de lo que se cree; y uno de los mitos más peligrosos (y estigmatizantes) para nuestra salud sexual es pensar que siempre están vinculadas a enfermedades de transmisión sexual.
Las infecciones vaginales pueden producirse por factores muy diversos, como una higiene inadecuada, una variación de pH en la vagina, exponer la zona íntima a la humedad durante mucho tiempo o una herida en la piel de la zona. Para reducir y tratar estas infecciones vaginales recomendamos la gama de CLX de Cumlaude Lab, que nos ayudará a reequilibrar la microbiota vaginal. De todas formas, es muy importante seguir una buena rutina de cuidado íntimo basada en productos que no alteren tu pH vaginal y se adapten a cada momento en el que estés, y sobre todo, prevenirlas de forma consciente.
Existen el lubricante Prebiotic Lube que es específico para prevenir estas infecciones vaginales recurrentes.
¿Debo hacerme test de enfermedades de transmisión sexual si no tengo síntomas?
Sí. Muchas ETS son asintomáticas, por lo que es importante realizar dichas pruebas para detectarlas a tiempo.
Especialmente si tienes una vida sexual activa, con diferentes parejas y contacto sin protección (recuerda que el sexo oral también cuenta), recomendamos realizar pruebas de ETS y chequeos con el ginecólogo de manera regular.
Infórmate, explora, comunícate y no dudes en buscar ayuda profesional si la necesitas; y comienza a disfrutar de una vida sexual satisfactoria y plena.
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