La gimnasia abdominal hipopresiva consiste en generar presión en la zona abdominal gracias al movimiento de nuestro diafragma. Esta presión tensa los músculos del abdomen y también tiene un efecto beneficioso para la musculatura del suelo pélvico.
Algunos de los beneficios que tienen estos ejercicios abdominales en nuestro organismo son:
- Mejora la postura y hace que los dolores de espalda disminuyan.
- Fortalece el suelo pélvico, previniendo y controlando la incontinencia urinaria. Por ello, es recomendable comenzar a practicar esta gimnasia cuando se alcanza la menopausia.
- Después del parto, este tipo de ejercicios son ideales para recuperarnos.
- Previene la aparición de hernias abdominales o discales.
- Y, por último, pero no menos importante, permite reducir el diámetro de la cintura.
¿Cómo llevar a cabo ejercicios de gimnasia abdominal hipopresiva?
Compartimos contigo el paso a paso para que puedas poner en práctica la gimnasia abdominal hipopresiva.
- Siéntate en el suelo con la columna lo más recta posible.
- Pega la barbilla contra el cuello dirigiendo la coronilla hacia el techo. Así la columna se encontrará lo más estirada posible.
- A continuación, respira abriendo mucho las costillas y suelta lentamente todo el aire de tu cuerpo.
- Tras este paso realiza una falsa aspiración. Si te resulta difícil, puedes taparte la nariz y la boca. Aguanta unos segundos en esta posición.
- Por último, coge aire y descansa.
¿Fácil, verdad? Dedica unos minutos al día para realizar este sencillo ejercicio. ¡Notarás los resultados!
Este tipo de ejercicios, además de ser muy fáciles de llevar a cabo, apenas tiene contraindicaciones, pero si tienes hipertensión o estás embarazada será mejor que lo consultes antes con tu médico.
Una vez controles los ejercicios básicos, puedes optar por ejercicios más avanzados o incluir objetos como balones medicinales, aros de pilates, pelotas de yoga… que te permitan alcanzar tu objetivo.